Más mujeres al frente del hogar… pero con menos acceso al patrimonio
En el municipio de Querétaro, los hogares están cambiando de forma y de liderazgo. Si bien los hombres aún representan la mayoría de las jefaturas de familia, las mujeres están ganando terreno de manera significativa, en particular en los rangos de edad clave para la vida productiva y familiar.
Con base en datos recientes, se estima que cerca del 38 % de los hogares en Querétaro ya están encabezados por mujeres. En números absolutos, esto equivale a más de 116 mil hogares donde una mujer —frecuentemente madre— toma las decisiones económicas y familiares.
¿Quiénes son estas mujeres jefas de hogar?
Las cifras son claras: las mujeres entre 30 y 54 años concentran el mayor número de jefaturas de hogar en la ciudad. Son más de 43 mil mujeres en ese rango, muchas de ellas madres, trabajadoras, emprendedoras y cuidadoras al mismo tiempo. Este grupo representa el núcleo más activo de la demanda por vivienda urbana.
Sin embargo, su acceso a la vivienda propia enfrenta barreras estructurales: brechas salariales, empleo informal, dobles jornadas laborales no remuneradas, y un sistema financiero que sigue privilegiando condiciones que no siempre se ajustan a su realidad.
¿Y qué pasa con los hombres?
Los hombres aún encabezan la mayoría de los hogares, especialmente entre los 35 y 54 años, donde se concentra la mayor parte de las jefaturas masculinas. Esto refleja una persistencia de los roles tradicionales, pero también un desfase: si la jefatura femenina crece más rápido que la masculina, las políticas habitacionales no pueden seguir ignorando esta transformación.
¿Cómo responder desde el sector inmobiliario?
Querétaro es una ciudad dinámica y en crecimiento, pero las soluciones de vivienda deben considerar el perfil real de quien demanda un hogar. Algunas acciones necesarias:
- Desarrollos con viviendas accesibles en precio para mujeres con ingresos medios o bajos.
- Integración de servicios cercanos como guarderías, escuelas, centros de salud y transporte público.
- Modelos de crédito con perspectiva de género que consideren ingresos mixtos o variables.
- Incentivos para proyectos habitacionales con espacios de cuidado comunitario.
Una oportunidad para construir justicia
Este 10 de mayo es una oportunidad para mirar más allá del festejo y reconocer que muchas madres en Querétaro son, además, sostenedoras principales de sus hogares. Atender sus necesidades de vivienda no es solo una cuestión de mercado, sino un acto de justicia social y de planeación urbana responsable.